El Hiyab

Por Safhir Sherezzadie (Venezuela).-

سورة الكوثر

إِنَّا أَعْطَيْنَاكَ الكَوْثَرَ (1) فَصَلِّ لِرَبِّكَ وَانْحَرْ (2) إِنَّ شَانِئَكَ هُوَ الأَبْتَرُ (3

En el Nombre Dios, El Compasivo, El Misericordioso

Sura La Abundancia (108:1/3)

  1. Te hemos dado la abundancia.
  2. Ora, pues, a tu Señor y ofrece sacrificios.
  3. Sí, es quien te odia el privado de posteridad.

Razón por la cual Dios reveló esta Sagrada Sura:

Una de las explicaciones que hay es que esta Sura fue revelada en Meca. Existen narraciones que dicen que uno de los asociadores de la época de la ignorancia se encontró con el Profeta (BPD) en el momento en el que salía de la mezquita, y que conversó un corto tiempo con el Enviado de Dios (BPD); un grupo de la tribu de Quraish que se encontraban observando a los lejos dentro de la mezquita esperaron a que el ignorante terminara de hablar con el Profeta (BPD) y le preguntaron en forma de burla que era lo que hablaba con ese hombre, el privado de posteridad (ABTAR, en árabe).

La explicación de porque al Santo Profeta (BPD) los enemigos lo llamaban por ese apodo era porque el Mensajero de Dios (BPD) había tenido dos hijos con Hadiya (P), Qasem y Abdullah, los cuales fallecieron. En aquella época, los árabes de La Meca le daban mucha importancia a los hijos varones; para ellos según sus costumbres, los hijos varones eran los que debían seguir la continuidad de los asuntos de sus padres y aquel que no tuviese un hijo varón lo hacían llamar ABTAR (privado de posteridad).

Los infieles se contentaron con la muerte de los hijos del Profeta (BPD), pues pensaron que después de la muerte del Mensajero de Dios (BPD), el Islam acabaría a causa de no tener hijos varones que protegieran y resguardaran su Mensaje Divino.

Pero sucedió que Dios Altísimo y Majestuoso descendió la Sagrada Sura         al-Kauzar lo cual fue un gran golpe para los enemigos del Islam porque esta Sagrada Sura se refería a la Santa existencia de la Señora de las mujeres del Paraíso Fátima Zahra (P); así de ésta forma la descendencia del Santo Profeta (BPD) a través de su adorada Hija (P) se dispersaría por todo el mundo, no tan solo contándose a los Santos Imames de Ahlul Bait (P), los cuales tienen su lugar especial, sino contando también los miles y miles de descendientes de Ésta Santa Señora Fátima Zahra (P), los cuales se encuentran esparcidos por la faz de la tierra y que defienden, cuidan y protegen el Divino y Sagrado Mensaje del Islam.

سورة النور

وَقُل لِّلْمُؤْمِنَاتِ يَغْضُضْنَ مِنْ أَبْصَارِهِنَّ وَيَحْفَظْنَ فَرُوجَهُنَّ وَلاَ يُبْدِينَ زِينَتَهُنَّ إِلاَّ مَا ظَهَرَ مِنْهَا وَلْيَضْرِبْنَ بِخُمُرِهِنَّ عَلَى جُيُوبِهِنَّ وَلاَ يُبْدِينَ زِينَتَهُنَّ إِلاَّ لِبُعُولَتِهِنَّ أَوْ آبَائِهِنَّ أَوْ آبَاءِ بُعُولَتِهِنَّ أَوْ أَبْنَائِهِنَّ أَوْ أَبْنَاءِ بُعُولَتِهِنَّ أَوْ إِخْوَانِهِنَّ أَوْ بَنِي إِخْوَانِهِنَّ أَوْ بَنِي أَخَوَاتِهِنَّ أَوْ نِسَائِهِنَّ أَوْ مَا مَلَكَتْ أَيْمَانُهُنَّ أَوِ التَّابِعِينَ غَيْرِ أُوْلِي الإِرْبَةِ مِنَ الرِّجَالِ أَوِ الطِّفْلِ الَّذِينَ لَمْ يَظْهَرُوا عَلَى عَوْرَاتِ النِّسَاءِ وَلاَ يَضْرِبْنَ بِأَرْجُلِهِنَّ لِيُعْلَمَ مَا يُخْفِينَ مِن زِينَتِهِنَّ وَتُوبُوا إِلَى اللَّهِ جَمِيعاً أَيُّهَا المُؤْمِنُونَ لَعَلَّكُمْ تُفْلِحُونَ

En el Nombre Dios, El Compasivo, El Misericordioso

Sura La Luz (24:31)

  1. Y di a las creyentes que bajen la vista con recato, que sean castas y no muestren más adorno que los que están a la vista, que cubran su escote con el velo y no exhiban sus adornos sino a sus esposos, a sus padres, a sus suegros, a sus propios hijos, a sus hijastros, a sus hermanos, a sus sobrinos carnales, a sus mujeres, a sus esclavas, a sus criados varones fríos, a los niños que no saben aún de las partes femeninas. Que no batan ellas con sus pies de modo que se descubran sus adornos ocultos. ¡Volvéos todos a Allah, creyentes! Quizás, así, prosperéis.

سورة الأحزاب

يَا أَيُّهَا النَّبِيُّ قُل لأَزْوَاجِكَ وَبَنَاتِكَ وَنِسَاءِ المُؤْمِنِينَ يُدْنِينَ عَلَيْهِنَّ مِن جَلابِيبِهِنَّ ذَلِكَ أَدْنَى أَن يُعْرَفْنَ فَلاَ يُؤْذَيْنَ وَكَانَ اللَّهُ غَفُوراً رَّحِيماً

En el Nombre Dios, El Compasivo, El Misericordioso

Sura La Coalición (33:59)

¡Profeta! Di a tus esposas, a tus hijas y a las mujeres de los creyentes que se cubran con el manto. Es lo mejor para que se las distinga y no sean molestadas. Allah es Indulgente, Misericordioso.

El hiyab o velo islámico

La palabra Hiyab es un vocablo árabe que posee varios significados, como: Cubierta, Un medio de cubrir, Velo y Cortina, Impedir.

El Señor del Universo ha dispuesto en la naturaleza del hombre la tendencia y deseo a cubrirse, especialmente en cuanto a las partes pudendas. La razón por la cual dispuso esto es porque entre el hombre y la mujer existe una permanente atracción sexual, la cual no se limita a un periodo específico de tiempo a diferencia de lo que sucede con los animales. El ser humano, en especial el hombre, desde el punto de vista psicológico, no es como algunos animales que teniendo una pareja ya no sienten ningún deseo por relacionarse con otro animal del sexo opuesto y quiso con esto de que los insititos sexuales del ser humano sean utilizados solo en su correcto rumbo sin que se produzcan los factores de la corrupción y decadencia de éste.

El Sagrado Corán presenta la desnudez como una trampa que Satanás tiende en el camino del hombre, la considera contraria a la naturaleza de los seres humanos y les advierte que no se precipiten en dicha trampa:

يَا بَنِي آدَمَ لاَ يَفْتِنَنَّكُمُ الشَّيْطَانُ كَمَا أَخْرَجَ أَبَوَيْكُم مِّنَ الجَنَّةِ يَنزِعُ عَنْهُمَا لِبَاسَهُمَا لِيُرِيَهُمَا سَوْءَاتِهِمَا إِنَّهُ يَرَاكُمْ هُوَ وَقَبِيلُهُ مِنْ حَيْثُ لاَ تَرَوْنَهُمْ إِنَّا جَعَلْنَا الشَّيَاطِينَ أَوْلِيَاءَ لِلَّذِينَ لاَ يُؤْمِنُونَ

¡Hijos de Adán! Que el Demonio no os tiente, como cuando sacó a vuestros padres del Jardín, despojándoles de su vestidura para mostrarles su desnudez. Él y su hueste os ven desde donde vosotros no les veis. A los que no creen les hemos dado los demonios como amigos. (7:27)

Lamentablemente, muchos, a lo largo de la historia, se han precipitado en la trampa de Satán, y la cultura occidental más que cualquier otra acogió esta trampa satánica para desnudarse y exhibirse.

Referente a esto, Imam Ali (P) dijo: En los últimos días, que será la peor de las épocas, habrá mujeres que en el momento que se vistan estarán desnudas con ropas ajustadas y que marcan la figura del cuerpo, saldrán de sus casas adornadas. Ellas serán las que se alejen de su religión y las que se revelarán contra la misma, se inclinarán hacia sus pasiones y placeres; los asuntos que Dios ha prohibido los convertirán en lícitos a su favor. Estas son las que se encontrarán atrapadas en el castigo del Infierno.

En nuestros días vemos clara la grandeza y sabiduría de este dicho de Imam (P). Las mujeres actualmente van en búsqueda de diferentes modas; escogen zapatos, ropas que no tan solo no las cubre sino que exponen y sobresaltan las bellezas de sus cuerpos; vestiduras estas muy modernas que manifiestan su desnudez.

En el Sagrado Corán han sido revelado unas aleyas muy explicitas en cuanto a la obligación del Hiyab e incluso sus limites y forma. La mas importante de ella es aleya que recitamos y leímos hace un rato la cual es la Nº 31 la Sura Nº 24 La Luz, pero también en la aleya Nº 30 de esta misma Sura dice: “Di a los creyentes que recaten sus miradas y conserven su pudor, porque ello es mas disculpable para ellos porque Dios esta bien enterado de cuanto hacen.” Y ya que portar un Hiyab no significa solo cubrirse el cuerpo el Ayatollah Mutahhari nos explica en un extenso e interesante análisis referente a esto que el recato de la mirada no significa cerrar los ojos en el momento de ver a un no intimo, sino que significa “bajar la mirada”, es decir, no mirar intencional ni fijamente, en otras palabras, a veces la persona mira a otra con minuciosidad para observar su ropa y su maquillaje, pero otras veces, es una mirada circunstancial al momento de hablar con alguien, puesto que es un preliminar para el hablar que se mire al interlocutor, la cual no es intencional. Entonces la aleya coránica se refiere es al no mirar fijamente. También en la siguiente aleya la Nº 31 dice: “Y di también a las creyentes que…” menciona exactamente las mismas responsabilidades para las mujeres. Las leyes del Islam no han sido fundadas sobre la base de la discriminación y diferencias. Si es que vemos que la responsabilidad de cubrirse es específica de las mujeres se debe a que su pertinencia se encuentra solo en las mujeres. La mujer es manifestación de belleza y el hombre manifestación de embelesamiento, entonces es natural que sea a la mujer que se le diga “no te exhibas frente al hombre”. Por ello, aunque la orden de cubrirse se ha establecido para las mujeres, en la práctica algunas sociedades los hombres salen más cubiertos que las mujeres, ya que la tendencia del hombre es mirar no mostrarse, en tanto que la inclinación de la mujer es mostrarse. También parte de aleya se refiere al adorno, esto abarca tanto  a los adornos que se unen al cuerpo, por ejemplo el maquillaje, como a aquellos que están separados del cuerpo, por ejemplo las joyas, y luego exceptúa a algunas personas. En otra parte de esta aleya se habla del modo de cubrirse: “que cubran su escote con el velo”; es decir, que tiendan sus pañuelos sobre sus pechos. Esto se debe a que las mujeres árabes usaban ya un tipo de pañuelo que dejaba ver su cuello y parte de su pecho, y naturalmente quedaban a la vista sus aros y collares. Es a raíz de un suceso de este tipo que sucedió la Revelación de la Aleya del Hiyab la cual pasaremos a relatar:

En un día caluroso en Medina, una mujer joven y bella pasaba por los callejones, lo cual  era costumbre, había colocado su pañuelo por detrás del cuello, quedando a la vista el contorno del mismo y sus aros. Un hombre de entre los discípulos del Profeta (BPD) se aproximaba por frente suyo y aquella bella mujer lo atrajo de tal modo que permaneció desatento de si mismo y de su alrededor. Aquella mujer entro en un callejón y el joven la seguía con su vista. Mientras caminaba chocó contra una pared y un vidrio o yeso que sobresalía de la pared hirió su rostro. Cuando volvió en si se dio cuenta de que su rostro sangraba. Con este mismo estado visito al Enviado de Dios (BPD) y le contó lo sucedido. Aquí fue cuando se revelo la aleya: “Y di a los creyentes que recaten sus miradas…” en este relato están de acuerdo los interpretes de ambas escuelas.

Razón por la cual fue prescripto el Hiyab en el Islam

 El termino Hiyab se define como cubrirse y en el Islam el Hiyab es un conjunto de virtudes y exaltados valores, de los cuales cubrirse es solo una de sus dimensiones. El Islam en su avance hacia la perfección, insiste en la devoción interna y de corazón, antes de hablar de cubrirse externamente (en su apariencia). Si el ser humano siente que Dios esta presente en todo lugar y ni un solo instante está desatento de El, automáticamente se aleja del pecado.

El Islam en la cuestión de la relación hombre y mujer enfatiza antes que nada en la fe y en una sincera devoción, puesto que si alguien obtiene esta grandeza, naturalmente tendrá en cuenta otras cuestiones como el Hiyab, la castidad y la necesidad de cubrirse.

En su libro “La Cuestión del Hiyab”, Dice el Mártir Ayatollah Mutahhari: “desde el punto de vista de la situación de la mujer frente al hombre, ocasiona que el valor de la mujer se eleve ante él.”

La verdad es que la cuestión del Hiyab no consiste en que si es bueno para la mujer aparecerse en la sociedad cubierta o semidesnuda; el espíritu de esta cuestión reside en que ¿acaso la mujer y el aprovechamiento del hombre de la mujer debe ser gratis? ¿Acaso el hombre debe tener derecho de deleitarse de cada mujer, en cada reunión lo máximo que pueda, a excepción de la fornicacion, o no?

El Islam, que ve al espíritu de la cuestión dice: “No”, solo en el ámbito familiar y la ley matrimonial y junto a una serie de pesados compromiso, los hombres pueden beneficiarse de una mujer como su esposa legal, pero en el ámbito de la sociedad esta prohibido aprovecharse de las mujeres ajenas, y también esta prohibido para las mujeres ponerse al alcance de los hombres fuera del seno matrimonial, de cualquier forma y grado.

Lo mencionado constituye la razón de la vestimenta islámica. Y si quisiéramos echarle a la cuestión una mirada general, debemos decir que el Islam referente al Hiyab se arraiga en una cuestión mas general y fundamental porque quiere limitar los placeres sexuales ya sea a través de la vista, del contacto u otra manera, al ámbito matrimonial y en el marco del casamiento legal, y quiere que la sociedad se limite a un ambiente de trabajo y actividad. Contrario al actual sistema occidental que mezcla los trabajos y actividades con los placeres sexuales. El Islam quiere separar estas dos cosas completamente una de la otra.

Ayatollah Mutahhari menciona cuatro razones para el Hiyab: Tranquilidad psíquica, Firmeza y consolidación del vinculo familiar, Consolidación de la sociedad, Valor y respeto por la mujer.

  • Tranquilidad síquica: El primer fruto del Hiyab es el sosiego psíquico. La inexistencia de un límite en las relaciones entre hombre y mujer y el libertinaje acrecientan las emociones y excitaciones sexuales y convierte al deseo sexual en una sed espiritual y en un deseo insaciable. El instinto sexual es un instinto poderoso, profundo y es como un mar, cuanto mas se le obedece, se vuelve más rebelde, al igual que el fuego, que cuanto mas se alimente mas se avivaran sus llamas. La mirada del hombre hacia la mujer no es como su mirada al pan y al agua, que una vez satisfecha ya no tiene deseo, sino que, al contrario, se convierte en forma de avidez y de deseo de poseer variedad de mujeres. El Islam pone completa atención al extraordinario poderío de este instinto fogoso. Existen numerosas narraciones en cuanto a la peligrosidad de la mirada, la peligrosidad de estar a solas con una mujer no intima, y finalmente la peligrosidad de este instinto que vincula y une al hombre con la mujer. El Islam ha predispuesto medidas para moderar y amansar este instinto y al respecto determina las obligaciones tanto para las mujeres como para los hombres. La aleya del Hiyab establece una obligación común para el hombre y la mujer que se refiere a la mirada. El espíritu del ser humano es extraordinariamente sensible, y no se limita a unos marcos específicos para luego sosegarse. De la misma manera que el ser humano no se sacia en cuanto a las riquezas y posiciones, en relación con lo sexual también es así, y por otro lado el deseo ilimitado es irrealizable, queramos o no; y siempre esta acompañado con un tipo de sentimiento de privación y el espíritu insaciable solo encuentra su sosiego es a través del recuerdo y mención de Dios. Entonces teniendo en cuenta que el hecho de que un deseo ilimitado es irrealizable, ello significa no alcanzar las aspiraciones o los deseos y eso conlleva a desordenes espirituales y síquicos. En el mundo occidental se han incrementado en gran cantidad las enfermedades síquicas debido a la libertad sexual y a la abundancia de elementos excitantes que se exhiben a través de diarios, revistas, cines, teatros e incluso en avenidas y calles, y como no hay posibilidad de responder a todos esos llamados, ello da como resultado la enfermedad y la privación. No obstante, dentro del Islam existe la orden del Hiyab y una de las razones de su prescripción es que la tendencia a mostrarse es particular de las mujeres. En lo que se refiere a “adueñarse de los corazones”, el hombre es presa y la mujer cazadora, así como desde el punto de vista de “adueñarse del cuerpo” la mujer es presa y el hombre es cazador. De esta forma, Ayatollah Mutahhari en su libro rechaza la opinión de Russell y deja en claro que “los instintos sexuales no se sacian a través de una libertad completa, sino que es un instinto rebelde, por ello la única forma de moderarlo es con el Hiyab y la no mezcolanza entre hombres y mujeres, y no la libertad sexual que acerca al hombre al salvajismo y lo aleja de la humanidad y los valores humanos”. 
  • La firmeza y consolidación del vinculo matrimonial y familiar: No hay duda de que cualquier factor que tenga efecto positivo en la consolidación del vínculo familiar y origine la cercanía y la intimidad en las relaciones de pareja es beneficioso para la institución familiar y debe ser fortalecido; por el contrario, cualquier factor que cause la debilidad y frialdad en la relación de pareja debe ser combatido. La razón para el Hiyab y el impedimento de aprovecharse sexualmente de quien no es pareja legal consiste en que la esposa legal, síquicamente, debe ser considerada como el motivo de su felicidad, mientras que en un sistema de libertinaje muchas veces la esposa legal desde el punto de vista psíquico es considerada como una rival, una molestia y un vigilante, por lo tanto, la institución familiar se cimenta sobre las bases del odio y la enemistad. Mientras que el Hiyab y una relación limitada entre sexos en la sociedad ocasiona que se eleve la posición de la mujer ante su esposo y eso mismo es lo que endulza la vida. Pueden comparar dos sociedades, una en las que las mujeres usan el Hiyab y en la otra no. En la sociedad en la que las mujeres usan el Hiyab, el hombre fuera de su casa ve a todas las mujeres no intimas cubiertas, y si es necesario, se relaciona con ellas con un respeto mutuo; y en su casa ve a su esposa sin Hiyab, con ropas bellas y adecuadas. ¿Es este hombre quien valora mas su vida matrimonial o aquel que en su sociedad observa a todo tipo de mujeres, sin Hiyab, con bellas ropas y maquilladas? Por mas que su esposa fuese muy bella y elegante, al momento de comparar seguramente habrá visto a una mujer aún mas bella o atractiva en la calle, por ello, inconscientemente a veces su apego a su vida conyugal disminuye y la posición de su esposa se rebaja ante él. Imagínense que sucede entonces si su esposa no goza de gran belleza; en muchos casos tal persona, bajo diferentes excusas, trata de alejarse de su mujer y este mismo asunto lleva a veces al divorcio. Esta es una cuestión racional y si reflexionamos un poco en la misma nos convenceremos de su veracidad. Sin duda el Hiyab conforma un factor importante en la consolidación del vínculo familiar y la razón por la que hoy muchas mujeres en Occidente abrazan el Islam y contraen matrimonio con hombres musulmanes. Se debe a su aspiración de encontrar una calida e intima institución familiar, lo que todo ser humano ilusiona tener.
  • Estabilidad de la sociedad: La falta del Hiyab y la divulgación de las relaciones libres es la causa de la paralización de la sociedad toda. Lo que paraliza las fuerzas de la mujer y aprisiona sus capacidades es la privación de las actividades económicas y sociales, y en el Islam no existe tal cosa. El Islam considera la obtención de conocimiento como una obligación para ambos sexos y no prohíbe para la mujer ninguna actividad económica o social. Cubrir el cuerpo excepto la cara y las manos no impide a ninguna actividad social, lo que paraliza a la sociedad es contaminar el ambiente de trabajo con los deseos pasionales. 
  • Valor y respeto por la mujer: Dice el mártir Mutahhari: el hombre desde el punto de vista físico tiene superioridad sobre la mujer y la mujer desde el aspecto sentimental y afectivo siempre ha guardado su superioridad sobre el hombre. El mantener un limite de parte de la mujer frente a los hombres siempre ha sido uno de los medios misteriosos que la mujer usa para resguardar su posición y lugar ante el hombre; el Islam estimula a la mujer a aprovecharse lo mejor posible de este medio y enfatiza que cuanto mas la mujer se comporte con seriedad, firmeza y castidad y no se exhiba frente a los hombres, ello incrementará su respeto. En la aleyas del Sagrado Corán, luego de recomendar a las mujeres cubrirse, en la aleya 59 de la Sura al-Ahzab Nº 33 dice: …“Es lo mejor para que se las distinga y no sean molestadas…” Esto quiere decir, es lo mejor para que sean conocidas como castas y se sepa que ellas no desean disponerse en manos de los hombres, y que no quieren que éstos las molesten; así, como resultado, esto ocasiona que sean respetadas y que las personas necias y corruptas se alejen de ellas.

 

Hadices:

Dijo el Profeta (BPD): La mejor de vuestras mujeres es la casta (que salvaguarda su pudor frente a los demás) y fervorosa (con su esposo).

Dijo el Imam As-Sadiq (P): La mirada (ilícita a una persona del sexo opuesto) es una de las flechas envenenadas de Satanás; quien se abstenga de ella por Dios Imponente y Majestuoso, no por otra cosa, Dios hará que como resultado de ello tenga una fe tal de la cual guste su sabor.

Dijo el Profeta Muhammad (BPD): Todos los ojos en el Día del Juicio Final estarán llorando, excepto tres ojos: un ojo que llore por temor a Dios, un ojo que baje su mirada frente a lo ilícito, y un ojo que quede en vigilia por las noches por la causa de Dios (este último abarca la vigilancia, enfermería, etc., si es que sirven a las personas con intención de acercamiento a Dios).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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