El Islam y el modernismo

por Safhir Fernández (VENEZUELA).-

La familia y los valores éticos y morales en el Islam.

Introducción.

El hombre y el modernismo.

Desde el punto de vista de la disponibilidad de facilidades para la vida, el hombre de nuestra época ha alcanzado un gran nivel. Los innumerables descubrimientos e invenciones le han provisto de oportunidades que anteriormente le parecían totalmente fantásticas.

Los instrumentos automáticos y los implementos electrónicos han hecho posible cosas que hasta hace unos años eran imposibles. Apretando un botón puede obtener lo que quiere: agua, aire, calor, frío, alimento y vestimenta. Las ondas radiales llevan la voz y la imagen a los rincones mas apartados del mundo en un abrir y cerrar de ojos.

Los ingenios aéreos han dominado la extensión del espacio. Con facilidad y rapidez el hombre vuela ligeramente a largas distancias.

Los astronautas han abierto para el hombre el camino hacia otros planetas.

Los nuevos descubrimientos científicos e industriales se han expandido de tal manera que resulta difícil enumerarlos.

Se puede decir que la naturaleza ahora esta empeñada en descubrir para el hombre en el tiempo mas corto posible todos los innumerables secretos que guardo en su seno durante miles de años.

Como resultado de la familiarización con los secretos de la naturaleza y sus maravillosos descubrimientos para el control y explotación de estos, el hombre de nuestra era ha alcanzado el auge del bienestar material y ha convertido toda la tierra en un lugar bien provisto y magnifico para su propio beneficio, con el objeto de llevar una vida tranquila y segura.

Pero, lo anterior mencionado es una cara de la moneda. Ahora veamos la otra cara de esto.

Civilización material

La civilización material de hoy día ha resuelto muchos problemas de la vida humana y ha dado al hombre un poder deslumbrante para controlar la naturaleza.

Pero al mismo tiempo el hombre ha elogiado y exagerado tanto la filosofía del tener más y más que se ha convertido en un animal codicioso y ansioso, que en todo el día no se preocupa y no piensa en otra cosa sino en aumentar su economía y en como gastarla.

El materialismo y la preocupación excesiva por las cuestiones económicas lo han convertido en una máquina. Está siempre ocupado en la obtención de sus medios de vida o en encontrar los medios para poder llevar una vida cada vez más lujosa.

Con el progreso de la civilización material las necesidades de consumo del hombre han aumentado y la forma de satisfacerlas también ha aumentado su complejidad, al grado de que muchas personas sacrifican su bienestar físico y moral para alcanzar este fin. En la sociedad materialista de hoy día han sido puestos a un lado todos los elevados valores humanos.

Desde hombres de la calle hasta hombres de alta sociedad, hombres con elevados títulos intelectuales incluso muchos hombres que se dedican a las mas elevadas cuestiones espirituales, tanto en Occidente como en Oriente, han sido afectados por las tentaciones materiales y económicas y todos tienen como lema “alcanzar los beneficios económicos y los placeres materiales resultantes de los mismos”.

Día y noche se le dice al hombre que no es más que un animal económico y que la riqueza y la prosperidad económica son los únicos criterios para la buena fortuna y el único signo de progreso de una nación, una clase o un grupo. Se le repite constantemente al oído que el dinero tiene un poder milagroso y que puede resolver todos los problemas.

Los seres humanos de nuestra era se han vuelto esclavos de la producción y del consumo, inclinados a adquirir dinero de cualquier manera para gastarlo en la obtención del placer más grande posible. Sus vidas están totalmente desposeídas de los altos valores convenientes para la vida del ser humano y han tendido hacia la vulgaridad y la degradación.

Ahora bien, debido a que el hombre es un ser conformado por Dios de Materia, es decir de barro o arcilla, que es lo que representa su cuerpo y busca la satisfacción de este, es decir, la satisfacción material, también busca la satisfacción del otro elemento por el que esta formado: El del Espíritu, y que es representando por sus sentimientos, el intelecto y el razonamiento. Para q el ser humano pueda lograr la felicidad absoluta en este mundo debe haber una total armonía entre estas dos conformaciones del hombre y es así como Dios envía El Islam para el control de esto.

Búsqueda de la filosofía de la vida y sus objetivos

En distintos puntos del mundo se han hecho oír nuevas voces frente al interés del hombre por la producción y el consumo, y lo mas gratificante de esto es que dichas voces pertenecen a la juventud, dando lugar a la esperanza de que posiblemente ha llegado el momento de liberar al ser humano de nuestro tiempo de los grilletes del mito económico.

Los jóvenes quieren saber si esta esplendida civilización da alguna importancia al propio ser humano; si todas las cosas inventadas para facilitar la vida le sirven realmente o por el contrario dichas cosas se han apropiado de todas las capacidades mentales y físicas de este; si la facilidad del mundo moderno que ha reducido tanto las distancias entre ciudades, continentes e incluso planetas convirtiéndolos en una casa grande, también ha acercado mas los corazones de sus habitantes, o si por el contrario, a pesar de la reducción de las distancias, sus corazones se han alejado mas, o lo que es peor, ya no poseen corazones y el hombre ahora solamente tiene manos y cerebro dedicados exclusivamente a satisfacer su estomago, a servir a su lujuria y a buscar riquezas o bienes, estatus y otras cosas similares.

La simple vida material es tan buena como un espejismo. Los esfuerzos del hombre codicioso y lujurioso no proporcionan ningún beneficio.

Y es aquí donde Dios Altísimo y Elevado a través del Sagrado Corán recalca que las cosas de la vida y toda la grandeza de estas no tienen sentido:

“Sabed que la vida de acá es juego, distracción y ornato, revalidad en jactancia, afán de mas hacienda, de mas hijos. Es como un chaparrón: la vegetación resultante alegra a los sembradores, pero luego ves que amarillea, luego se convierte en paja seca…” (57:20)

“Las obras de los infieles son como espejismo en una llanura: el muy sediento cree que es agua, hasta que, llegado allá, no encuentra nada….” (24:39-40)

Claramente vemos que el hombre está desprovisto de una dirección y de un sentido, enredado y empantanado en la vulgaridad y sigue con la pregunta sin respuesta: ¿Cuál es el sentido de la vida y cual es su objetivo?

De acuerdo al Sagrado Corán, la verdadera causa de toda esta confusión y vulgaridad es que el hombre ha sido desposeído de dos cosas importantes para él como son: La Fe y La Espiritualidad; y concentra sus esfuerzos solo en el progreso material. Puede tener el mayor éxito en el logro de sus fines materiales, pero mas allá de eso fracasa para asegurar lo que es digno del ser humano sintiéndose insatisfecho con el resultado.

“Quien desee la recompensa de la vida de acá, sepa que Dios dispone de la recompensa de la vida de acá y de la otra Dios todo lo oye, todo lo ve.” (4:134)

Pero hay un punto en este tema de La Fe en el cual debemos poner especial atención.

La Fe es aquella información y/o conocimiento que luego de estar en la mente del ser humano pasa a su corazón y queda encerrado(a) allí. Esta información y/o conocimiento deben ser absolutamente veraces. No se puede adquirir La Fe por imitación o tradición.

El Sagrado Corán referente a la adopción de una doctrina enfatiza que La Fe debería basarse en el conocimiento y el estudio satisfactorio. Si no se basa en el conocimiento veraz, ello no tiene valor y debería continuarse la búsqueda de la verdad.

Para que La Fe sea verdadera no debe generar dudas y mucho menos llegar al punto de suponer o conjeturar acerca del conocimiento de una doctrina o actitud.

“Pero la mayoría no siguen sino conjeturas, y, ante la Verdad, las conjeturas no sirven de nada. Ala sabe bien lo que hace.” (10:36)

El Sagrado Corán desaprueba el seguir sin ningún examen crítico que valga la pena la misma doctrina o la misma política social o actitudes que le fueron inculcadas por su entorno o medio ambiente. Exhorta repetidamente a la discusión y al análisis lógico:

Dicen: “Encontramos a nuestros padres en una religión y, siguiendo sus huellas, estamos bien dirigidos. Y así, no enviamos a ningún monitor antes de ti a una ciudad que no dijeran los ricos: encontramos a nuestros padres en una religión e imitamos su ejemplo.” (43:22-23)

Desde el punto de vista coránico, el hombre tiene el deber de usar sus facultades de aprendizaje y conocimiento, independientemente de las ideas que los padres les imparten o de las adquiridas por estos durante su infancia. Debe observar cuidadosamente el mundo que lo rodea y debe observarse a si mismo y de esta manera investigar para poder llegar a un conocimiento claro y a una conclusión definida que le pueda formar la base de su creencia y de su comportamiento personal y social en la vida.

En las enseñanzas del Islam han sido tomadas en cuenta todas las necesidades de la persona tanto materiales como las espirituales. Ha mejorado la mente humana y ha elevado las normas de vida del hombre.

Es una religión con vida, que provee vitalidad al género humano, y es el camino mas claro para llegar a Dios.

El Islam quiere que el hombre comprenda su lugar en el universo y su relación con el Todopoderoso. Quiere hacerle comprender que debe vivir respetuosamente en la sociedad y que no debe ser dominado o humillado. El hombre no es solamente una combinación de sangre, huesos y carne con necesidades y deseos materiales, por lo tanto, debe ser conciente, libre y creativo y así también dirigir su vida y su voluntad.

El Islam es la religión de la revolución. Es esta perfecta creencia la que da nacimiento a los distintos derechos y responsabilidades del hombre, a la vez que le enseña la filosofía de la vida.

Es una ideología que interpreta y guía los movimientos revolucionarios y eleva la sociedad a su más alta perfección. Cambia los criterios y valores de la vida individual y social para establecer un sistema de valores nuevos y superiores. Esparce La Luz y La Justicia de Dios sobre la tierra.

Ahora bien:

Voy a tratar en el siguiente trabajo de desarrollar un aspecto importante de las relaciones sociales del hombre; La Familia, la cual representa la base de cualquier sociedad conocida; tanto Occidental como Oriental, y en la cual el Islam promulga el desarrollo de ciertas normas de manera que sean aplicadas y así contribuir fehacientemente al logro de la felicidad colectiva.

La familia y los valores éticos y morales en el Islam

Para comenzar debemos definir lo que es la sociedad.

La sociedad

La sociedad se origina a partir de un conjunto de vínculos naturales o adquiridos que reúnen a un número de individuos y les vuelve una comunidad coherente.

Hay muchos tipos de sociedad y desde distintos ángulos se la puede dividir en distintas clases.

Algunas clases son limitadas y pequeñas como la familia, y otras son grandes y amplias como la tribu, el clan, la comunidad, la nación, etc.

La familia

En cuanto a las relaciones existentes entre los diferentes miembros de una familia, el lazo mas importante es el existente entre marido y la mujer, pues de el depende el bienestar de toda la familia y en conjunto el de la sociedad.

Aunque la vida de los esposos se origina en el instinto sexual de manera natural, gradualmente se desarrolla una suerte de profunda relación espiritual, sentimental económica y social. Esto es a lo que llamamos unión conyugal o matrimonio.

El matrimonio desde el punto de vista occidental

La moral occidental está basada en la moral cristiana

Una breve reseña histórica de los antecedentes morales en Occidente nos dice que la primera persona en el cristianismo que hablo de moral sexual fue San Pablo; este apóstol enseñaba que el celibato era mejor que el matrimonio: “Loable cosa es en el hombre no tocar mujer.” (Corintios 7:1); y que el cuerpo humano no era para el placer sexual, sino para El Señor exclusivamente; El cuerpo no es para la fornicacion, sino para El Señor como El Señor es para el cuerpo… ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo?” (Corintios 6:13,15)

Sin embargo San Pablo sabía que el celibato significaba represión de la naturaleza humana, y que la naturaleza humana no podía ser reprimida. El sabía que si el matrimonio era totalmente prohibido la gente se daría a ello ilegalmente. Así él dice: “Mas, por evitar la fornicacion, viva cada uno con su mujer, y cada una con su marido.” (Corintios 7:2)

Entonces para evitar que la gente olvidara la santidad del celibato, él continua: “Esto lo digo por condescendencia, pero no lo mando. En verdad me alegraría que fuesen todos tales como yo mismo… Pero si que digo a las personas no casadas y viudas: bueno les es si así permanecen como también permanezco yo. Más si no tienen dominio de sí, cásense. Pues mas vale casarse que abrasarse.” (Corintios 7:6-9); es decir; en otras palabras, el matrimonio comparado al adulterio es el menor de dos males.

Además San Pablo continúa describiendo que el matrimonio significa angustia: “Creo que en la inminente angustia es bueno este estado, es bueno al hombre permanecer así… ¿Estas sin tener mujer? No busques el casarte. Si te casaras, no por eso pecas. Y si una doncella se casa tampoco peca; pero estos tales sufrirán la tribulación de la carne, que yo os quiero ahorrar.” (Corintios 7:25-28)

De acuerdo con la Biblia, el matrimonio y lo agradable a Dios son opuestos el uno al otro. San Pablo dice: “Yo deseo que viváis sin inquietudes. El que no tiene mujer anda solícito de las cosas del Señor y en lo que ha de agradar a Dios. Al contrario, el que tiene mujer anda afanado en las cosas del mundo y en como agradar a la mujer, y se halla dividido. De la misma manera, la mujer no casada, o una virgen, piensa en las cosas de Dios, para ser santa en cuerpo y alma. Mas la casada piensa en las cosas del mundo, y en como ha de agradar al marido. Por lo demás, os digo esto para provecho vuestro; no para echaros un lazo, sino solamente para exhortaros a lo mas loable y a lo que habilita para servir a Dios sin embarazo.” (Corintios 7:32).”

Y concluye la posición cristiana como sigue: “En suma, el que da a su hija en matrimonio, obra bien; mas el que no la da, obra mejor.” (Corintios 7:38)

Así desde el punto de vista cristiano referente al matrimonio en su forma original puede ser resumido como sigue:

– El celibato es bueno y debe ser adoptado.
– Para abstenerse del adulterio, el matrimonio está permitido, pero es deplorable y se debe intentar evitarlo.
– El matrimonio retarda la salvación y no es agradable a Dios.

Trescientos años después de San Pablo aparece un teólogo conocido como San Agustín. Igual que su predecesor, el creía que el sexo era una amenaza para la edificación espiritual. El fue mas lejos que San Pablo, asociando culpa con sexo: “No conozco nada que rebaje mas a la mente humana de las alturas, que las caricias de una mujer y la unión de los cuerpo.” (Escritos básicos de San Agustín, Pág. 455)

El predica que:

– El sexo era vergonzoso debido al pecado de Adán y Eva.
– La castidad y el celibato eran de una moral más alta que el matrimonio.
– El celibato era un requisito previo para los curas y las monjas.

Luego en la época victoriana los cristianos estaban preocupados en el como utilizar el sexo y reconducirlo a sus mas elevados fines. Para los cristianos de esa época un hombre de moral se abstendría del sexo fuera del matrimonio y habría de ser altamente selectivo y considerado en su expresión sexual dentro del matrimonio. Y una mujer de moral soportaría estas experiencias esporádicas y no haría nada por fomentarlas. El placer no era una meta conveniente para ningún sexo pero especialmente, no lo era para la mujer.

– Moralmente el sexo esta peor considerado que el celibato.
– La pasión sexual en los seres humanos es el resultado del pecado original, por tanto, el sexo por placer es inmoral.
– El sexo sin placer esta permitido solamente con la intención de la procreación.

Pero si una religión cierra sus ojos a las complejidades de los problemas familiares, sus seguidores, tarde o temprano, se revolverán contra ella, destrozando todos los principios religiosos como consecuencia de la rebelión.

El cristianismo ignoro las reclamaciones de la naturaleza humana, alabando la idea del celibato. Por un breve período este esquema funciono bien. Mucha gente entusiasta intento vivir para ese ideal. Monjes y monjas se encerraron en los monasterios. Entonces la naturaleza tomo su revancha; los monjes y abades cultivaron la idea de que ellos eran representantes de Cristo, y a las monjas se les dio el titulo de novias de Cristo; así, con facilidad de conciencia, ellos convirtieron los monasterios en centros de libertades sexuales. Los escritos de la Edad Media están llenos de relatos sobre conventos de monjas que semejaban prostíbulos, de gran multitud de infanticidios dentro de sus muros y de incestos entre el clero, lo cual forzó a la iglesia a anunciar que a los curas no les seria permitido vivir con sus madres y hermanas.

Esa fue la consecuencia de una moral sexual antinatural. Aquellos que no podían suprimir sus instintos sexuales, se dieron a los actos inmorales secretamente; otros como Martín Luther, se sublevaron contra la iglesia y comenzaron un movimiento de reforma que abandonó el celibato.
Cuando la iglesia cristiana perdió influencia en los asuntos sociales del mundo Occidental, el hombre laico se sublevo. Esta revuelta consiguió el impulso de la II guerra mundial y los cristianos occidentales iniciaron la revolución sexual como reacción a la represión sexual. Un movimiento de reforma lleva a la sociedad de un extremo al otro.

La cultura dominante en Occidente, pregona como solución a la satisfacción del impulso sexual, el que las personas (sean heterosexuales o del mismo sexo), escojan a una persona o tengan relaciones intimas, sin mediar ningún tipo de matrimonios. Esta concepción esta basada en una filosofía que dice que el ser humano es libre de hacer todo aquello que su voluntad determine; y considera al matrimonio como una especie de cárcel, donde se limita de una manera autoritaria esa “libertad sexual”. De una manera objetiva vemos que esto ha conllevado a que en los lugares donde se practica esta opción, han aumentado los problemas sociales, y sicológicos además de los espirituales. El aborto, el sida, miles de hijos de madres solteras, delincuencia juvenil, etc. En lugar de impulsar a las personas a una mayor realización de sus potencialidades humanas, este tipo de prácticas lo han llevado a la corrupción moral, y a la degradación del honor personal, familiar y social.

Primeramente Occidente viajo de un extremo (el de la represión sexual) defendido por la iglesia cristiana, al otro extremo (al del sexo libre y para diversión) defendido por la moral sexual liberal. En segundo lugar, Occidente se ha dado cuenta de que el sexo libre y el sexo para diversión no es aceptable para la sensibilidad humana. Finalmente, después de saltar de un extremo a otro, Occidente esta anhelando una nueva moral de sexo responsable. Desde mi punto de vista, la moral responsable es la moral sexual equilibrada del Islam.

El matrimonio desde el punto de vista islámico

La naturaleza ha arreglado de tal manera al hombre y a la mujer que ellos se atraen mutuamente. Esta atracción natural los une y los conduce a una vida en común y a formar una familia. Esta tendencia natural o instinto sexual, igual que cualquier otro instinto debería ser guiado a la dirección correcta para que pueda ser utilizado al servicio de la humanidad.

También el Islam ha dado una gran importancia a la cuestión del matrimonio en su sistema social. En el Sagrado Corán y en los dichos del Profeta (BPD) y de los Imames (P), encontramos al matrimonio recomendado en gran medida.

Se ha relatado del Profeta Muhammad (BPD) que ha dicho:

No hay nada mas querido para Dios, Imponente y majestuoso, que una casa cimentada en el Islam por medio del matrimonio… (Al-Kafi, t.5, p.328)

El objetivo básico del matrimonio en el Islam estriba en:
A.- Asegurar una atmósfera confortable para el marido y la mujer:

Un matrimonio que sigue el Sagrado Corán debería ser siempre una fuente de confort mutuo y sus mutuas relaciones deberían estar muy por encima del simple goce sexual alcanzando el estadio de la amistad cordial acompañada de la mutua benevolencia y compañerismo.

“Y entre Sus signos esta el haberos creado esposas nacidas entre vosotros, para que os sirvan de quietud, y el haber suscitado entre vosotros el afecto y la bondad. Ciertamente, hay en ellos signos para gente que reflexiona.” (30:21)

Sobre la base de este versículo, el objetivo del matrimonio debería ser el mismo del de la creación de las parejas, es decir, esposas y esposos. Desde el punto de vista islámico no es simplemente un instrumento para legalizar las relaciones sexuales, sino, que es un acuerdo que une las existencias de los esposos dando un nuevo color y un nuevo ritmo a sus vidas. Saca de la soledad, privilegiando a la pareja en vez de al individuo solo y los hace complementarios.

B.- Dar a luz una nueva generación, criando a los hijos de manera saludable, en La Fe y La Virtud:

Dice el Sagrado Corán:

“Creador de los cielos y de la tierra. Os ha dado esposas salidas de vosotros y parejas salidas de vuestros rebaños, diseminándoos así. No hay nada que se Le asemeje. El es Quien todo lo oye, Quien todo lo ve.” (42:11)

La tradición islámica respecto a la elección de la mujer remarca un punto en el que la mujer propuesta debería ser capaz de dar a luz un hijo y por lo tanto no ser estéril.

Al nacer un hijo en la familia tanto el padre como la madre se ven abarcados en nuevas responsabilidades. En tanto el chico esta con ambos, cada uno tiene una responsabilidad proporcional a sus condiciones sociales, naturales y sentimentales.

A este respecto dijeron El Profeta Muhammad (BPD):

Honrad a vuestros hijos y educadlos en buena forma, así seréis objeto de perdón. (Bihar Al-Anwar, t.104, p.95)
Y el Imam As-Sayyad (P):

En cuanto al derecho de tu hijo, es que sepa que proviene de ti, y que en esta vida pasajera te será relacionado el mal o bien que realice; que tú eres responsable al haberte sido confiada su tutoría, respecto a su buena educación, oriéntale hacia su Señor, Imponente y Majestuoso, y ayúdale a obedecer a Dios. Por lo tanto, actúa con él del modo que obra aquel que sabe que será premiado por el bien que le haga y castigado por el mal que le haga. (Man la Iahduruh Al-Faqih, t.2, p.622)

Como la mujer ha sido provista por la naturaleza con un sistema, con la llegada de cada criatura tiene que someterse a las exigencias del embarazo, del parto y el amamantamiento del recién nacido. Durante el embarazo y la nutrición tiene una responsabilidad en el cuidado del niño. Así como también después de este período requiere de un cuidado constante; el profundo cariño de la madre y el tierno afecto acompañado al sacrificio educan sus talentos y facultades naturales. Los primeros años de la vida de la criatura es la época más impresionable durante la cual el fundamento de su personalidad queda al cuidado de la madre, conllevando esto al logro literario espiritual científico y social de éste.

El hombre igual carga con una gran responsabilidad la cual requiere también de sacrificios. Se encarga de los asuntos familiares. Las necesidades de subsistir deben ser provistas por él, es un factor importante para llevar el confort al hogar ya que él lleva la responsabilidad financiera y la manutención.

Una de las cuestiones relacionadas con el matrimonio y la formación de la familia es el de la elección de la esposa o del esposo. En este sentido el Islam contribuyendo moralmente presta atención a los siguientes puntos:

– Libertad en la elección de esposo o esposa por parte de estos mismos.
– Consentimiento de los padres para el casamiento de una joven (especialmente cuando es virgen).
– Igualdad o adecuación general para la alianza matrimonial, es decir, en el Islam todos los individuos de la sociedad son iguales, no hay discriminación ni de razas ni de clases.
– La fe que ambos deben tener en su ideología y modo de vida lo cual debe representar lo principal en ellos, ya que la sociedad islámica es ideológica. Nunca resultaría que personas de religiones o ideologías distintas sean capaces de crear una atmósfera cordial y coherente.
– La moral de los esposos en cuanto a su carácter y comportamiento.
– Competencia financiera ya que el hombre musulmán es quien provee a los medios de vida a su mujer e hijos.
– Compatibilidad y similitud en las ideas y los deseos de los esposos, este es uno de los factores más efectivos para el éxito de un matrimonio.

Además el Islam habla y recomienda a los esposos, asegurándoles la felicidad matrimonial y familiar sí ellos:

– Se percatan del concepto del matrimonio humano.
– No solamente son socios en vida sino que también son benevolentes, amigos y creyentes ambos en lo mismo.
– Juzgan necesario cooperar entre sí en todo sentido.
– Evitan todo tipo de arrogancia y altanería en su relación.
– Respetan sus derechos recíprocos e intentan componerse mutuamente.

En cuanto a algunos derechos de la mujer en el Islam esta la independencia financiera de ésta. En el sistema social islámico la mujer es igual que el hombre, financieramente independiente, puede obtener el dinero por medios legales, tienen un total control sobre sus propiedades y pueden disponer de las mismas como les guste. A este respecto dice el Sagrado Corán:

“Los hombres tendrán parte según sus meritos y las mujeres también.” (4:32)

Cabe destacar que en los países europeos la mujer se aseguró su independencia económica a partir de 1870. Países como Inglaterra en 1870, Alemania en 1900, Suiza en 1907, e Italia en 1919, pero hay que resaltar que el real motivo de la promulgación de las leyes del caso no fue la protección de los derechos de la mujer como un miembro libre de la sociedad humana, sino que el motivo principal fue animar a las mujeres a que trabajen en las industrias y factorías para beneficio de estas. Las leyes asumieron sus formas actuales solamente de manera gradual. Por otra parte, el reconocimiento de la independencia económica de la mujer en la ley islámica ha tenido solamente un sentido humanitario y nunca apuntando a su explotación económica. El historiador Will Durant ha dicho que Europa ha reconocido los derechos de propiedad de la mujer solamente para ponerla a su servicio.

La manutención es una responsabilidad legal en el sistema familiar islámico, y en el caso de la mujer, por parte del marido es obligatoria incluso aunque ella sea rica. Incluye todos los gastos necesarios y convencionales. El marido es responsable de la provisión de alimento, ropa, alojamiento y todo aquello necesario para la comodidad y manejo del hogar, por supuesto, tomando en cuenta la capacidad financiera del marido.

En cuanto al trabajo doméstico de la mujer en la casa donde vive con su esposo, depende totalmente de su propia voluntad, deseo o inclinación. Desde el punto de vista religioso y legal no hay ninguna compulsión.

La dote

En el contrato matrimonial el hombre se compromete a regalar algo satisfactorio a su mujer. Este regalo no debe ser considerado un precio de compra del cuerpo de la mujer ni tiene la característica de una recompensa por su servicio en el hogar o algo a lo que echar mano en el futuro en caso de separación o muerte. No es más que un regalo y si ella lo desea debe ser entregado inmediatamente. Este regalo lleva por nombre “dote” y representa un signo de sinceridad del hombre en lo que respecta a su cariño y ofrecimiento de matrimonio. Es un medio de exhibir el respeto del hombre por su futura esposa.

“Dad a vuestras mujeres su dote gratuitamente” .(4:4)

Los líderes islámicos han recomendado enfáticamente que el monto de la dote debería ser poco gravoso y las otras condiciones materiales sencillas, porque el significado moral de ésta es símbolo del interés y cariño del hombre hacia la mujer, el cual es mucho mas elevado que su valor material y financiero.

Dijo el Profeta Muhammad (BPD): El matrimonio de mayor bendición es el que ocasiona menos gastos. (Kanz Al-Ummal, t.16, p.299)

Las mejores mujeres de mi comunidad son las de rostro resplandeciente y las de menor dote. (Bihar Al-Anwar, t.103, p.236)

Dijo el Imam As-Sadiq (P): Ciertamente que, de entre las bendiciones de la mujer esta la poquedad de su dote, y de entre sus infortunios esta lo elevado de su dote. (Man la iahduruh Al-Faqih, t.3, p.387)

Es de advertir que concluido el contrato matrimonial, sea lo que fuese la dote, ésta se vuelve propiedad de la mujer. Ya sea un terreno, un jardín o una suma de dinero, su beneficio va exclusivo para ella. Solamente con el consentimiento de la mujer puede quedar el marido como custodio del mismo y usar los beneficios que depare en su vida en común.

El matrimonio y las relaciones sexuales

Es importante comprender que en los textos islámicos la idea de matrimonio no esta separada de la de sexo, el sexo no esta limitado al propósito de la procreación.

El Islam reconoce las necesidades sexuales de los seres humanos y cree que los instintos naturales deben ser educados, no reprimidos. El Islam dice que las partes de nuestro cuerpo responden a un propósito, que no han sido creadas en vano. No existe texto alguno en el Islam que equipare sexo con maldad innata o pecado.

El sexo ha sido abiertamente recomendado en el Sagrado Corán: “… Y cuando se hayan purificado, id a ellas como Dios os ha ordenado…” (2:222). La frase “como os ha ordenado” no se refiere a ninguna orden legislativa, es un mandato innato y se refiere al deseo sexual que Dios ha puesto en nuestra naturaleza. Y cuando el deseo sexual es considerado como un mandato innato de Dios no puede ser asociado de ninguna manera al pecado o la maldad.

El Islam ha recomendado altamente el matrimonio y no como el menor de dos males; el Islam se ha opuesto enérgicamente al celibato y al monacato; el Islam dice que el matrimonio no es un obstáculo en el camino espiritual, por el contrario ayuda al caminante.
Ciertas conductas del hombre liberal Occidental están totalmente prohibidas en el Islam, tales como: el sexo premarital, el adulterio, la masturbación, la homosexualidad y lesbianismo, ya que son conductas inmorales que llevan a la sociedad a la destrucción tanto individual como social.

Dios Altísimo dice en El Sagrado Corán:

Referente a la fornicacion y adulterio: “¡Evitad la fornicacion: es una deshonestidad! ¡Mal camino…!” (17:32)

Y su castigo: “Flagelad a la fornicadora y al fornicador con cien azotes cada uno. Por respeto a la ley de Dios, no uséis de mansedumbre con ellos, si es que creéis en Dios y en el último Día. Y que un grupo de creyentes sea testigo de su castigo.” (24:2)

Referente a la homosexualidad y el lesbianismo: “Y a Lot. Cuando dijo a su pueblo: ¿Os entregareis a una deshonestidad que ninguna criatura ha cometido antes? Por concupiscencia, os llegáis a los hombres en lugar de llegaros a las mujeres. ¡Si, sois un pueblo inmoderado!” (7:80-81)

Y su castigo: “E hicimos llover sobre ellos una lluvia: ¡Y mira como terminaron los pecadores!” (7:84)

Matrimonio por tiempo indeterminado

No cabe duda de que el instinto sexual debería conducir normalmente en la dirección del matrimonio permanente y a la formación de una familia, pero como todos los jóvenes en el umbral de la pubertad y en el momento del estallido de sus deseos sexuales no están en las condiciones de contraer matrimonio permanente, se ven a veces involucrados en desviaciones y perversiones sexuales.

En Occidente especialmente, hombres y mujeres tienen un elevado grado de contacto social entre sí, como no se había visto en ninguna época previa, conllevando esto a acrecentar las emociones y excitaciones sexuales. Contrario a Occidente, en el Islam no existe el noviazgo, pero las enseñanzas islámicas no ignoran ningún deseo natural, ni las distintas facultades físicas y mentales de los individuos, teniendo en cuenta todas las posibles necesidades sociales y han sugerido de manera realista una vía intermedia para resolver este problema.

Las enseñanzas islámicas han mostrado una manera práctica de resistir las pasiones, estimular el sexo y usar las facultades físicas y mentales de manera constructiva. El Islam da muchas instrucciones para facilitar el matrimonio, reducir la dote, gastar lo mínimo en el matrimonio y evitar las ceremonias innecesarias. Para resolver el problema sexual en los casos que los varones y hembras no encuentran forma alguna para el matrimonio permanente, la ley islámica ha sugerido un tipo de matrimonio por tiempo determinado.

El matrimonio por tiempo determinado o temporal en el Islam ha dado a los esposos el derecho de desarrollar sus propios derechos y planes esperados. Por ejemplo, el hombre no esta obligado al mantenimiento de la esposa a menos que haya sido estipulado así en el contrato matrimonial. Asimismo, la mujer puede poner una condición en el contrato de que no habrá relaciones sexuales. Tales condiciones son inválidas en un matrimonio permanente, pero están permitidas en el matrimonio temporal. Se estipula un término de tiempo definido del mismo.

Contrariamente a la idea de quienes sostienen que la legalización del matrimonio temporal puede dar lugar a las relaciones liberales e ilimitadas y así promover la inmoralidad, este esquema es un factor efectivo en el control del libertinaje y la consecuente ruptura de las familias.

Al respecto dice el Sagrado Corán: “¡Mandato de Dios! Os están permitidas todas las otras mujeres, con tal que las busquéis con vuestra hacienda, con intención de casaros, no por fornicar. Retribuid, como cosa debida, a aquellas de quienes habéis gozado como esposas. No hay inconveniente en que decidáis algo de común acuerdo después de cumplir con lo debido. Dios es omnisciente, sabio.” (4:24)

El beneficio del hiyab o vestimenta islámica a nivel familiar y por ende en la sociedad

El termino Hiyab se define como cubrirse y en el Islam el Hiyab es un conjunto de virtudes y exaltados valores, de los cuales cubrirse es solo una de sus dimensiones. El Islam en su avance hacia la perfección, insiste en la devoción interna y de corazón, antes de hablar de cubrirse externamente (en su apariencia). Si el ser humano siente que Dios esta presente en todo lugar y ni un solo instante esta desatento de El, automáticamente se aleja del pecado.

El Islam en la cuestión de la relación hombre y mujer enfatiza antes que nada en la fe y en una sincera devoción, puesto que si alguien obtiene esta grandeza, naturalmente tendrá en cuenta otras cuestiones como el Hiyab, la castidad y la necesidad de cubrirse.

Un punto el cual es muy delicado y debería también ser considerado, es referente al recato. Todas las religiones advierten que en la mujer existe el deseo innato de mostrarse a si misma y lo que existe en el hombre es una inclinación a flirtear y sentir placer por ello.

El historiador norteamericano Hill Durant dice, que no hay deseo más firme en el mundo y más perseverante que el deseo en el hombre de mirar a una mujer, no importa en que medida es controlado o restringido. Algunos sociólogos creen que la causa de los extremismos en el vestir de la mujer y su falta de pudor es la errónea creencia que la sociedad tiene sobre el tema, habiendo abandonado en su mayoría los valores morales que la dignifican.
Uno de los conceptos elevados del Hiyab es el de la cuestión de controlar la mirada, es decir, las mujeres con Hiyab no invitan a los hombres con actitud y vestimenta a que las miren. Decir que la vestimenta islámica sirve para encarcelar a la mujer dejándola sin derecho a relacionarse fuera de su casa, es decir una gran mentira, pues el Islam se basa respecto a esto en lo que es bueno para la familia.

En su libro “La Cuestión del Hiyab”, Dice el Mártir Aiatullah Mutahari: Desde el punto de vista del Islam, la limitación de los placeres sexuales al medio ambiente matrimonial y con la esposa legítima, ayuda a la salud psíquica de la sociedad. Desde el punto de vista familiar es el factor de la consolidación de las relaciones entre los miembros de la familia y el establecimiento de una perfecta intimidad entre los esposos. Y desde el punto de vista de la situación de la mujer frente al hombre, ocasiona que el valor de la mujer se eleve ante él.

Lo mencionado constituye la razón de la vestimenta islámica. Y si quisiéramos echarle a la cuestión una mirada general, debemos decir que el Islam referente al Hiyab se arraiga en una cuestión mas general y fundamental porque quiere limitar los placeres sexuales ya sea a través de la vista, del contacto u otra manera, al ámbito matrimonial y en el marco del casamiento legal, y quiere que la sociedad se limite a un ambiente de trabajo y actividad. Contrario al actual sistema Occidental que mezcla los trabajos y actividades con los placeres sexuales. El Islam quiere separar estas dos cosas completamente una de la otra.

Aiatullah Mutahari menciona cuatro razones para el Hiyab: Tranquilidad psíquica, Firmeza y consolidación del vinculo familiar, Consolidación de la sociedad, Valor y respeto por la mujer.

En el desarrollo de la segunda razón, Firmeza y consolidación del vínculo familiar, el nos dice:

No hay duda de que cualquier factor que tenga efecto positivo en la consolidación del vínculo familiar y origine la cercanía y la intimidad en las relaciones de pareja es beneficioso para la institución familiar y debe ser fortalecido; por el contrario, cualquier factor que cause la debilidad y frialdad en la relación de pareja debe ser combatido.

La razón para el Hiyab y el impedimento de aprovecharse sexualmente de quien no es pareja legal consiste en que la esposa legal, síquicamente, debe ser considerada como el motivo de su felicidad, mientras que en un sistema de libertinaje muchas veces la esposa legal desde el punto de vista psíquico es considerada como una rival, una molestia y un vigilante, por lo tanto la institución familiar se cimenta sobre las bases del odio y la enemistad. Mientras que el Hiyab y una relación limitada entre sexos en la sociedad ocasiona que se eleve la posición de la mujer ante a su esposo y eso mismo es lo que endulza la vida.

Pueden comparar dos sociedades, una en las que las mujeres usan el Hiyab y en la otra no. En la sociedad en la que las mujeres usan el Hiyab, el hombre fuera de su casa ve a todas las mujeres extrañas cubiertas, y si es necesario, se relaciona con ellas con un respeto mutuo, y en su casa, ve a su esposa sin Hiyab, con ropas bellas y adecuadas. ¿Es este hombre quien valora mas su vida matrimonial o aquel que en su sociedad observa a todo tipo de mujeres, sin Hiyab, con bellas ropas y maquilladas? Por mas que su esposa fuese muy bella y elegante, al momento de comparar seguramente habrá visto a una mujer aún mas bella o atractiva en la calle, por ello, inconscientemente a veces su apego a su vida conyugal disminuye y la posición de su esposa se rebaja ante él. Imagínense que sucede entonces si su esposa no goza de gran belleza; en muchos casos tal persona, bajo diferentes excusas, trata de alejarse de su mujer y este mismo asunto lleva a veces al divorcio. Esta es una cuestión racional y si reflexionamos un poco en la misma nos convenceremos de su veracidad.

Sin duda el Hiyab conforma un factor importante en la consolidación del vínculo familiar y la razón por la que hoy muchas mujeres en Occidente abrazan el Islam y contraen matrimonio con hombres musulmanes. Se debe a su aspiración de encontrar una cálida e íntima institución familiar, lo que todo ser humano ilusiona tener.

Conclusión

Finalmente puedo decir que la influencia del modernismo en el hombre de la sociedad actual, le ha proporcionado innumerables comodidades y satisfacciones a nivel económico y material que lo han hecho evolucionar de una manera eficaz en este plano, pero siendo el hombre creado por Dios no solo de cuerpo y necesidades materiales sino también de Espíritu y necesidades sentimentales y de razonamiento, debe mantener un equilibrio de estos y procurar el logro de la elevación moral que solo puede ser edificada en un sistema social como lo es el del Islam autentico, ya que es una religión que apunta al progreso y que Dios envió para todos los tiempos durante la evolución del hombre. Es en esta sagrada religión donde hay una clara comprensión de todos los aspectos de una sociedad, hay una comprensión de las maneras prácticas de llevar a cabo tal sociedad y hay una conciencia y esfuerzo definido acompañado por todo tipo de sacrificios. Empezando porque el Islam ayuda a regular y conducir el comportamiento del individuo solo y luego en su relación con el medio que lo rodea empezando por la base de toda sociedad como lo es de la institución familiar. Sacándolo de la animalidad a la luz del humanismo.

“Hoy os he perfeccionado vuestra religión, he completado Mi gracia en vosotros y Me satisface que sea el Islam vuestra religión.” (5:3)

Bibliografía

– El Corán, Fundation of Islamic C.P.W., Edición preparada por Julio Cortes.

– Un Ramo de Flores del Jardín de la Tradiciones del Profeta y Ahlul Bait (P), Compilado por: Aiatul-lah Saiied Kamal Faqih Imani, Traducido por: Faisal Morhell, Publicado por: Centro de Investigación Islámica Amir Al-Mu’minin ‘Ali (P), 2000.

– Introducción a la Cosmovisión del Islam, Beheshtí y Bahonar, Fundación Cultural Oriente, 2da Edición, 2007.

– Matrimonio y Moral Sexual en el Islam, Sayyid Muhammad Rizvi, Traducción al castellano: Karima Amatullah, Edición Raúl González Bórnez, 2007.

– Revista Islámica Kauzar, Edita: Asamblea Mundial de Ahlul Bait (P), 1er trimestre 2007.

– www.redislam.com, Risalatul Mutah: El Matrimonio Temporal en el Islam, Sheih Muhammad Eessa Ibarra, Biblioteca Islámica Ahlul Bait (P), 2003.

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