Por Lic. en Psicología, Heba Smith.-
“Y entre Sus señales está el haber creado de vosotros mismos parejas para que encontréis calma junto a ellas. Y ha puesto entre vosotros afecto y misericordia…” (Corán 30, 21)
En los últimos tiempos con la accesibilidad a las redes sociales y la vertiginosidad del tiempo, se ha producido un fenómeno llamado “fraudes matrimoniales”. Dicho fenómeno no es ajeno a la realidad de los musulmanes, sobre todo a las musulmanas que son las víctimas de estas estafas o engaños que algunas personas mal intencionadas realizan.
Generalmente estos engaños se producen vía internet, una muchacha conoce a un hombre por Facebook, Instagram, Twitter, u otras redes sociales.
Algunos ejemplos de cómo engañan los bandidos matrimoniales:
- Al principio empieza con una charla de amigos y luego el hombre le propone a la muchacha ser “novios”. Bien hermana, aquí tenemos el primer problema o el primer signo para evaluar las verdaderas intenciones del muchacho; en el islam el concepto de noviazgo no existe. Si el joven te propone ser novios, pues debes saber hermana que te está faltando el respeto, no solo como mujer, sino como musulmana.
- Otra de las situaciones que comúnmente suceden es que el hombre en cuestión, dice que esta enamorado de ti y que viajara a tu país para conocerte o planear casarse, y solicita ayuda para el visado; tu lo ayudas, el joven viaja, se conocen y suele suceder que te pide dinero para que lo ayudes mientras busca un trabajo porque se le acabo lo que traía. Generalmente la mujer enamorada piensa más desde el punto de vista sentimental, pues esta obnubilada por la situación que está viviendo, y piensa ¿cómo puedo negarme a ayudarlo?
- Entabla una relación contigo, y no quiere conocer a tus padres, como manifestaba anteriormente no existe ningún concepto que avale el noviazgo, amigos con derecho, etc…, en el islam la relación entre dos personas esta enmarcada en la orbita familiar, es decir que, si el joven esta interesado en establecer una relación seria con una muchacha deberá conocer a los padres de la misma, a pesar de que no sean musulmanes.
- La joven esta realizando un viaje de turismo, y uno de los guías o acompañantes del tour, nativo del país, se enamora, y le propone conocerse y luego de mantener un amor relámpago, le habla de viajar con ella o a visitarla.
- Hará un matrimonio secreto, sin testigos y sin dote.
- Te hablara con frases tales como te amo, quiero estar contigo íntimamente, envíame fotos y pon videollamada para verte.
Existen muchísimas más formas de engañar a una mujer ingenua y/o con carencias afectivas, solo puse las mas comunes o las que he oído.
¿Cabe preguntarse porque suceden estas “estafas”?
En el proceso de enamoramiento se ponen en juego mecanismos biológicos, culturales o educacionales y emocionales. En este sentido, el engaño matrimonial o fraude, tiene varios aspectos a analizar, primero el factor cultural, las mujeres en occidente son criadas bajo la idea del príncipe que viene a conquistar a la princesa o rescatarla, estos preconceptos culturales están muy arraigados al inconsciente colectivo al decir de Jung. Entonces crecen y maduran con estas imagenes en su inconsciente colectivo, y luego se ven reflejadas en el accionar, tal como ser el caso de creer que este joven es el hombre ideal, el creer en el romanticismo, que con amor todo se soluciona, etc.
Por otro lado, estos manipuladores emocionales, tienen la habilidad de hablar dulcemente, son muy buenos armando historias y excusas para su proceder; por lo cual saben muy bien la fragilidad o debilidades de la mujer que van a engañar. ¿Como sucede esto?, pues bien observan, analizan y saben que decir y que hacer en el momento indicado, ¿por qué?, porque saben evaluar y manipular las emociones féminas, para su provecho.
En estas relaciones, la autoestima y la mala autorregulación emocional se ponen en juego, siendo estas la causa y efecto de la dependencia de estas relaciones.
La vulnerabilidad en la que se encuentra la mujer muchas veces por la necesidad de afecto, hace que luego de pasar por esta situación traumática de abandono y engaño queden devastadas emocionalmente e incluso económicamente, sintiéndose usadas; todo ello muchas veces lleva a que se produzca una desilusión a nivel religioso.
Otro aspecto a señalar es que muchas jóvenes hermanas musulmanas, desconocen sus derechos y deberes como mujeres creyentes, sobre todo los relacionados al matrimonio y la familia, por lo cual son blancos fáciles para estos aprovechadores.
Muchos de estos hombres no están buscando una relación seria o formal, sino pasar el tiempo y divertirse mientras aprovechan la ventaja económica, algunos de estos hombres tienen familias en sus países y viajan al exterior en busca de un mejor ingreso para sus familias, otros solo quieren disfrutar de la vida.
En el islam siempre se hace referencia a la búsqueda del conocimiento y a la reflexión; y en este sentido es muy importante que las musulmanas puedan acceder a la información certera a cerca de como se establecen las relaciones humanas en el islam, entre otras cosas.
Nuevamente hay que resaltar que en el islam no existe el noviazgo, no existe el concubinato, las relaciones ocultas; todo ello es un invento de estos hombres para poder disfrutar de una relación momentánea, y para no tener ninguna responsabilidad ante la mujer. El islam es muy claro en este sentido, el hombre que tiene real interés en una mujer hablará con su familia, se conocerán en la etapa de compromiso (en donde no hay contacto físico) y luego si llegan a un acuerdo se casarán.
El islam da a la mujer un lugar muy importante, y la protege de todo mal, pero para que dicha protección se lleve a cabo deben establecerse algunas circunstancias, formación e información, búsqueda del conocimiento; los centros islámicos y/o mezquitas deben dar charlas a cerca del matrimonio en el islam.
Si un joven te habla de casamiento, de establecer una relación, y sientes que tu familia no puede comprender la situación debido a que no son musulmanes, trata de buscar un referente en tu comunidad de forma que sea tu wali, tu representante, un sheij, de forma que busque información del joven en cuestión.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que hay muchos tipos de “matrimonios” que se usan de forma tal de hacerle creer a las jóvenes que son halal, pero en realidad no lo son; como el caso del matrimonio Orfi que se usa en Egipto, este tipo de supuesto matrimonio tiene un contrato que se firma o no, se realiza con testigos, pero no esta registrado en ninguna oficina de registro civil o religiosa, es decir que no tiene una validez jurídica ni religiosa. Nuevamente como en muchos otros casos que mencione anteriormente, es solo la búsqueda de un marco disque legal a las relaciones sexuales de la pareja.
Es recomendable realizar el matrimonio en un centro islámico y/o mezquita, con testigos, wali; y luego el casamiento civil tanto en el país de la muchacha, como en el país de origen del joven, de forma tal que quede amparada por las leyes religiosas y civiles de los países.
Se ha observado que algunas jóvenes piensan que están casadas porque un hombre musulmán de nacimiento le ha hecho creer que haciendo una videollamada ya están casados o porque se casaron sin testigos, y luego cuando se presenta a la embajada del país de origen del joven para reclamar sus derechos, se les informa que en dicha entidad y en ese país no hay ningún registro de dicho casamiento, el peor de los escenarios es el de los hijos no reconocidos o reconocidos pero que son hijos de una relación haram o ilícita.
Muchas mujeres piensan que hablar de dote es sinónimo de una transacción comercial, y dicen no quiero dote, o tienen temor de solicitarla; la dote es una parte importante del matrimonio pues sin dote el matrimonio no es válido. El Corán dice a este respecto: “Dad a las mujeres la dote correspondiente de buen grado, pero si renuncian voluntariamente a parte de ella en vuestro favor, disfrutadlo con provecho”. (Corán 4,4)
Hay un hadiz del profeta Muhammad (SAW) que dice:
“Las mejores mujeres de mi comunidad son las de rostro más resplandeciente y las de menor dote.” [1]
Dijo el Mensajero de Allah (SAW): “Cásate, aunque sea por un anillo de hierro.” [2].
Entonces hermana no tengas miedo de hablar de la dote, es tu derecho.
Algunas señales que un hombre es sincero en su intención:
- No te pide ser su novia, te va a pedir ser su esposa.
- Se va a presentar a tu familia y viceversa, nunca va a tener una relación oculta o secreta.
- Se pondrá de acuerdo contigo a cerca de la dote y las condiciones que quieren plasmar en el contrato matrimonial.
- No te pedirá que te exhibas, ni con fotos sin hiyab ni con videollamadas para ver tu cabello y cuerpo.
El matrimonio en el islam, es un acto de adoración a Allah, hay un hadiz del Mensajero de Allah (SAW) que dice:
“Quien se casa ha salvaguardado la mitad de su religión.” Y en otro hadiz dice: “Que tenga conciencia de Allah en la otra mitad o en lo restante.” [3]
Los musulmanes nos casamos para evitar entrar en relaciones ilícitas, y salvaguardar nuestra moral y nuestra belleza. Es la forma de preservar los valores familiares y que se establezca la descendencia en base al amor y el respeto.
“…Y (son lícitas para vosotros) las mujeres libres y honestas que sean creyentes, así como las mujeres libres y honestas de los que recibieron el Libro antes que vosotros, si les dais sus dotes como casados, no como fornicadores ni como los que toman amantes.
Y quien niegue la creencia, habrá perdido sus obras y en la Última Vida será de los perdedores”. (Corán 5,5)
En este breve artículo, quise demostrar algunos rasgos de acciones del estafador matrimonial, de modo que las hermanas nuevas en el islam, puedan tener una idea a cerca del comportamiento de algunos musulmanes que actúan mal y hacen cosas incorrectas en nombre del islam.
Es importante que, a la hora de buscar pareja, se observe primero su Din, su religiosidad o espiritualidad; su Khuluq, es decir su personalidad o comportamiento y por último el Qudra ‘ala an nafaqa, su capacidad económica para afrontar la manutención de la familia.
Ten en cuenta que el matrimonio es acto de adoración a Allah, por medio del cual se busca el crecimiento personal y espiritual.
No hay que dejarse cegar u obnubilar por palabras bonitas, por un lindo rostro; si tienes dudas a cerca de las intenciones del hombre que estas conociendo busca un referente de tu confianza en la comunidad para que hable con él. Si te generan incertidumbres las propuestas que te realiza, busca una hermana o un sheij que te guíen y asesoren a cerca de como es el matrimonio y el compromiso en el islam.
A la hora de enfrentarte a una relación nueva, trata de controlar tus emociones. Maneja tus emociones y no permitas que ellas te manejen a ti.